La
película de Suspense, o en su título original The Innocents,
fue considerada uno de los grandes
clásicos del cine de terror de todos los tiempos, y la verdad que no desmerece
nada la pena.
Es
la adaptación al cine de la novela de Henry James The turn of the
screw, producida por Jack Clayton en 1961 y se
trató de un film muy novedoso para aquellos tiempos ya que Jack Clayton consiguió
salir del encasillamiento por el “free cinema” por el que pasaba en ese momento
el cine inglés. Suspense tuvo
el gran mérito de haber logrado algo muy difícil en cine: adaptar un texto muy conocido siendo fiel a
la obra original pero aportándole los elementos diferenciadores suficientes
para que funcione, también, como una pieza única y singular de cine…
La
película reúne los ingredientes básicos del género: escenarios tétricos,
personajes aislados de la sociedad, misterios desconocidos, apariciones…
La
verdad que observando la película podemos ver muchas similitudes con algunas
producciones de cine de terror actual. Lo que me hacía reflexionar que Suspense
podría tratarse de la pionera en este tipo de cine y ha dado mucho de comer
después a otros directores que tomaron referencias de ella, como sucede con
toda película “de culto” que se precie.
Al
tratarse de una película antigua, a mi parecer sí que existen algunos aspectos
en ella que nada tienen que ver con las producciones actuales. Por ejemplo,
muchos de los efectos especiales con los que cuenta la película no están muy
logrados, así como el nivel de terror no llega hasta su punto máximo como
pueden hacerlo las películas actuales con las que realmente se siente el miedo al
verlas, pero aun así, debemos de tener en cuenta que muchos de los aspectos
tratados en la película eran muy novedosos en aquellos tiempos y rompían con la
sociedad del momento. Uno de los aspectos que yo creo que en general nos llama
la atención de esta película es el papel de los niños. Actualmente es muy
normal que en los film de terror e intriga uno de los personajes principales
venga a manos de un niño, incluso puedo decir que un niño, en mi opinión, da
mucho más miedo interpretando este tipo de papeles. Pero para aquella época
esto tendría que haber sido un aspecto muy
chocante. “Chocante” ya que los dos niños no solo están implicados en la
trama principal, si no que interpretan un papel que no corresponde para ese
tipo de edad. Podemos ver como a lo largo del film los dos niños van dejando a
tras su inocencia y haciéndose cada vez más perspicaces y picarones .Aspecto
que no correspondía a la de un niño como ya he dicho.
Sobretodo
es la relación de Miles y la institutriz la que más parece inquietar al
espectador. (Se ha dicho que el beso entre ambos es el beso menos casto y más
inquietante del cine clásico. En efecto es algo totalmente inesperado y
fuera de lugar que da mucho que pensar sobre la educación de los niños).
Otro
de los aspectos que también me llamó la atención al ver la película fue el
papel de la institutriz interpretado en su momento por Deborah Kerr, al que yo
personalmente encontré muchas similitudes con el papel interpretado por Nicole
Kidman en la película “los otros” . Las dos películas presentan muchas
similitudes por lo que puedo decir que” los otros” ha sido muy influenciada por
“the Innocents”; pero sin duda la influencia más importante, a mi perecer la
tiene el personaje principal de las dos producciones. Es tanta la similitud que
me atrevo a decir que incluso estás dos mujeres son muy parecidas físicamente, aunque
ésta no fuera la intención principal de los productores sino más bien la de
interpretar un papel muy parecido.

Pero
sí que encontré una diferenciación clara con las películas actuales. En el cine
de ahora, prácticamente todas las películas tienen su argumentación (más o
menos lógica) y un desenlace que queda bastante claro al espectador más
avispado, pero al contrario que ahora el film de Jack Clayton da lugar a
diferentes interpretaciones tras su final, pues el director no deja
clara cuál es la verdad de la historia. Nunca sabemos si efectivamente Miles y
Flora se encuentran poseídos o si es fruto de la imaginación de la Señorita
Giddens. El final queda abierto, vemos a Miles desfallecer en
los brazos de la institutriz pero no sabemos si es consecuencia del
“desposeimiento” o de la presión a la que la Señorita Giddens le somete.
A mí personalmente no me gusta nada este tipo
de finales, prefiero que los finales tenga un verdadero sentido del trascurso
de la película y no se pueda interpretar de varias formas como ocurre en ”the
innocents”.
No creas, en el cine clásico (no necesariamente de terror) han niños siniestros. Estos no son del todo extraños. La película es magnífica y su final abierto contribuye a su carácter ambiguo. ¡Buen comentario!
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